Atrás las ideas y el mundo de las ideologías
la confusión impera desde el cúmulo de riqueza sin sabiduría distributiva.
La nave imperial hace aguas y toca fondo desde la mediocridad
crisis moral desde el vacío sin rumbo que precede la debacle imperial,
dimes y diretes cuál república bananera.
El clímax de la sociedad líquida en todo su esplendor,
afrentas personales como chisme de barrio con aroma a payasos,
el coloso del norte perdió el rumbo de ejemplo de la libertad global.
Sin carisma ni visión de jefes de estado para liderar la humanidad
sabor a tierra sin policía global con crisis del contrato social,
guerra fría con nuevos muros de Berlín imaginarios.
El clímax de la sociedad líquida en todo su esplendor,
show televisivo decadente de mal gusto y nauseabundo
triste realidad tras los excesos de borrachera de la globalización.
Signos de demolición para la civilización conocida
protagonistas somos de la destrucción creativa de Schumpeter,
mundo desconocido de fuertes nacionalismos en el horizonte
tiempos de más cambios con olor a tambores de guerras,
Zygmunt Bauman desde la confusión húmeda del sabor a pandemia.