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BACALAO CON GARBANZOS PONTY

Era un jueves que parecía domingo. Serían las 8:33am, y Jacques le Bon se ejercitaba en el parque Bosque de la Vida. Se levantó temprano. Ya había realizado sus meditaciones matutinas, desayunado y leído la prensa. La convulsión global producía escalofríos. Estamos a las puertas de la tercera conflagración global susurraba Jacques. Las declaraciones del adolescente Mesías Redentor Globalista de los tiempos eran un primor: Te tenemos ubicado Ayatollah, pero todavía no te mataremos. La locura de los acostumbrados mensajes nocturnos en redes del hombre le producían humor. Recordó, mientras caminaba en comunión con el parque como microcosmo de la madre naturaleza, la reflexión del día del Solo por Hoy, que invitaba al humor, a reírse de si mismo para lograr fluir en este pequeño universo.

Al llegar a casa prosiguió con sus ejercicios de pesas y calistenias. Era Corpus Christi, Jacques le Bon estaba solo consigo mismo en su hogar. Los muchachos ya de vacaciones, pernoctaban ya en la casa de playa desde el miércoles junto a su amada Marisol. Jacques se uniría a su familia el viernes luego de concluir su jornada laboral. Jacques le Bon dedicado al oficio del comercio desde muy joven, curtido en el sacerdocio del comercio de la mano de su padre y maestro, le brotaban desde sus venas el mandato: primero el deber, después la devoción.

Ya en la cocina bebía agua apresuradamente como la hostilidad del clima. De repente un buey imaginario habló: Cocina para tí hoy Jacques le susurró. Como un mandato de los dioses Jacques le Bon fiscalizó con ojos de águila la nevera, la despensa, el freezer para evaluar las posibilidades. Desde que abrió la puerta del freezer divisó unos lomos de Bacalao fresco empacados al vacío. Con las papilas humedecidas. La boca hecha agua vociferó Lomo de Bacalao con Garbanzos Ponty:

INGREDIENTES

Un lomo de Bacalao, dos tomaticos bien maduros Barceló picados, cuatro ajos picados en finas lonjas, media cebolla blanca picada, cuatro hojas de Laurel, un buen pimiento de piquillo cortado en tiras, pimentón dulce, sal marina,aceite de oliva, pimienta, taza y media de garbanzos españoles en conserva, toque de azúcar.

EL PROCESO

Ya el Bacalao descongelado naturalmente. Lo sazonamos con sal, pimienta, oliva y le colocamos hojas de laurel encima, para que el lomo de Bacalao respire todo una media hora. En un sartén de hierro fundido oliva con laminas del ajo, pasamos el bacalao vuelta y vuelta hasta un leve dorado. Sacamos reservamos el Bacalao. En el mismo sartén más oliva, el resto del ajo hasta que nos regale su perfume. Ahí mismo incorporamos la cebolla y las hojas de laurel, y movemos hasta se cristalicen en fusión total. Luego el tomate, dos minuto después el pimiento del piquillo. Posteriormente agregamos una cucharada de sal y media de azúcar. Bajamos el fuego,movemos y batimos con cariño. Incorporamos los garbanzos a la salsa, previamente retirarle el líquido. Volvemos a mover con cariño junto a nuestra cuchara de madera. Poco más de sal tras probar y poco más de azúcar. Tras unos 25 minutos a fuego lento, hacemos un hueco en el medio y colocamos nuestro Bacalao, vuelta y vuelta. Luego de pasar todas sus partes por el hierro y el fuego, batimos para incorporar el todo: Salsa, cuerpo y espíritu. Ahí derramamos el pimentón dulce por el todo.

Ya listo apagamos el fuego, leves movimientos y dejamos reposar par de minutos. Servimos en plato: debajo una montaña de los garbanzos con la salsa y encima nuestro Lomo de Bacalao. Decoramos con minucias de perejil picado. Sugerimos, tras nuestro Lomo de Bacalao con garbanzos Ponty, un maridaje celestial con una porción de tarta Santiago DelaCasa. Que os aproveche.

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