El nuevo período se perfilaba raro. Las carencias hasta en lo básico, como suciedad en oficinas públicas o baches en calles con tiempo sin hacer nada eran símbolo. Un tira y jala de reformas, contrareformas como dimes y diretes se entronizaba en un mucho más decir que hacer como razón de Estado. Como flashes Jacques le Bon recordaba la eterna Montonera nacional. Los Gavilleros, los revolucionarios de turno como conglomerado eterno en todas las etapas del acontecer nacional. Mutan las formas. Cambian los símbolos como el caballo junto al cinto de tiros y pistola y, ahora la yipeta con sus accesorios de atmósfera contemporánea.
Jacques …