Sudoroso saltaba en la cama. Otra noche de ficción y algarabía de sueños. La muerte de Bertolucci era material. El símil de la decadencia imperial-partidista, Peter O’toole como tutor del gran capital cuando llegue la cuenta, la grandiosidad del poder que arrebata, materia prima en ese extraño escenario de sueños. Deseos de cambio y el fin de la brumosa peste púrpura. 20 años de politburó maldito, bono-gas, bono-luz, bono-romo a la usanza de la escuela populista Chavista-Da silva que asfixia. Posterga la necesaria aceptación para cambiar del ethos. Un sentimiento de hartazgo hasta del real progreso pero prestado tan cacareado. Todo empezó a las 10:42pm, …









